¿Cómo pedirte perdón si te herí de muerte,
no la muerte física, sino la muerte en vida,
la que más duele?
¿Cómo pedirte perdón si fui el asesino de tu belleza,
el que opacó tu brillo y te privó de tu libertad?
¿Cómo ser perdonado
si ya no soy humano?
Me he convertido en el monstruo que muchos odian,
he sido la maldad enmascarada y he vivido de la luz ajena.
¿Cómo pedir perdón
si tus heridas no tienen sanación?
Culpable soy
de mi alma sin salvación.
Mi condena acepto:
ser el prisionero de este infierno
donde tu amor ya no tengo.
Mi mayor deseo:
amarte, aunque no debo.
Tú cisne, y yo cuervo.